Morelia, Michoacán a 2 de diciembre de 2025.- En 2013, una pareja de Tailandia acaparó la atención internacional al protagonizar uno de los récords más insólitos del Guinness World Records: el beso más largo del mundo. Su hazaña duró exactamente 58 horas, 35 minutos y 58 segundos, un tiempo que supera con creces lo imaginable cuando se habla de mantener un gesto tan íntimo sin interrupciones.
El reto fue mucho más que un acto romántico. Para validarlo, debieron seguir reglas extremadamente estrictas: no podían sentarse, dormir, soltarse ni tomar descansos. Tampoco se les permitía perder el contacto físico en ningún momento. Durante casi tres días permanecieron de pie, lidiando con dolor corporal, agotamiento físico, hambre y un sueño abrumador, convirtiendo la prueba en un desafío de resistencia más cercano a una competencia extrema que a una demostración de afecto.
Su determinación, mezcla de amor, disciplina y deseo de dejar una marca en la historia, convirtió el evento en un fenómeno mediático. A más de una década, el récord sigue vigente y se mantiene como una de las demostraciones públicas de afecto más exigentes y sorprendentes jamás registradas.
