Morelia, Michoacán a 19 de septiembre de 2025Una carpeta de investigación de la Fiscalía General de la República (FGR) revela cómo, desde 2018, la célula criminal conocida como “La Barredora”, presuntamente ligada al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), controló actividades ilícitas en Tabasco: venta de droga, robo de gas LP, cobro de piso a escorts, tráfico de migrantes y armas.
El testigo protegido C.T.D.R., exsecretario particular de Hernán Bermúdez Requena, aseguró que cuando este asumió el cargo de secretario de Seguridad de Tabasco, repartió el territorio entre lugartenientes, quienes debían entregarle cada semana 2 millones de pesos en su domicilio. Entre los beneficiados, según la FGR, estuvieron Ulises Pinto Madera “El Mamado”, Daniel Hernández Montejo “Prada”, y Gabriel Gómez Vázquez “Indeco”, entre otros.
La ruptura interna estalló en diciembre de 2023: tras un atentado fallido en el fraccionamiento Campestre de Villahermosa, comenzaron quemas de Oxxos, bloqueos y decapitaciones de policías estatales, cuyas cabezas aparecieron en Chiapas en enero de 2024.
El testigo afirma que Bermúdez dio su aprobación para que se “bajara” (asesinara) a los policías, pero pidió que los cuerpos no fueran hallados en Tabasco durante la visita del entonces presidente Andrés Manuel López Obrador.
La crisis obligó al gobernador interino Carlos Manuel Merino a pedir la renuncia de Bermúdez. Las rencillas entre los operadores continuaron hasta que en julio pasado se registró la detención de Ulises Pinto Madera, uno de los principales líderes de la facción.
Este caso revela la profunda infiltración del crimen organizado en las estructuras de seguridad de Tabasco, desatando una de las etapas de violencia más graves en la historia reciente del estado.
