Morelia, Michoacán, 25 de noviembre de 2025.- El diputado Toño Carreño Sosa presentó una iniciativa de reforma a la Ley de Educación del Estado con el propósito de incorporar la educación alimentaria y la soberanía alimentaria como contenidos obligatorios desde el nivel básico, al señalar que estos conocimientos son fundamentales para la salud pública y el bienestar de la población.

Durante su exposición en tribuna, explicó que garantizar el derecho a la alimentación implica no solo disponibilidad de alimentos, sino también acceso a información y formación que permitan comprender su valor nutricional y cultural. Señaló que Michoacán enfrenta un doble reto: en zonas rurales persisten índices elevados de desnutrición, mientras que en zonas urbanas aumentan los casos de obesidad y enfermedades metabólicas, una situación que requiere una estrategia educativa integral.
Carreño Sosa enfatizó que las escuelas son un espacio clave para formar hábitos saludables desde la infancia. Por ello, la iniciativa propone un enfoque vivencial que incluya huertos escolares, talleres de cocina tradicional, ferias de alimentos saludables, visitas a productores locales y actividades comunitarias que fortalezcan el vínculo entre producción, consumo y salud.
Recordó que, de acuerdo con CONEVAL, más del 24 por ciento de la población michoacana presenta carencias relacionadas con el acceso a alimentos nutritivos, mientras que datos del Instituto Nacional de Salud Pública muestran que más del 35 por ciento de niñas y niños en edad escolar presentan sobrepeso u obesidad. Estos indicadores, afirmó, reflejan la necesidad de una política educativa que aborde la nutrición y la soberanía alimentaria de manera estructural.
El legislador también remarcó la importancia de promover la identidad y autonomía alimentaria del estado mediante el fortalecimiento de saberes agrícolas tradicionales como la milpa, los huertos familiares y la gastronomía originaria. Expuso que la soberanía alimentaria debe enseñarse como un principio que contribuye a la economía local, a la protección del territorio y al conocimiento de los recursos propios.
Finalmente, propuso que esta estrategia educativa se construya de manera interinstitucional entre las secretarías de Educación, Salud y Bienestar, e incluya capacitación docente y materiales didácticos contextualizados a las regiones y lenguas originarias. Señaló que la iniciativa apunta a desarrollar una política pública coherente, inclusiva y con impacto a largo plazo en la salud de la población michoacana.




