Uruapan, Michoacán. — Con un mensaje que levantó expectativa política, el gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, afirmó durante el aniversario del ABC de Michoacán en Uruapan que “de esta mesa va a salir quien tenga que sustituirme”, dejando entrever un escenario de sucesión dentro de una mesa donde había hombres y mujeres ungidos como corcholatas para el 2027.
El evento reunió a buena parte de la élite política michoacana. Entre los presentes estuvieron el Fiscal General del Estado, Carlos Torres Piña; el alcalde de Morelia, Alfonso Martínez Alcázar; el alcalde de Uruapan, Carlos Manzo; además de las integrantes del gabinete estatal, Gaby Molina Aguilar, secretaria de Educación, y Gladyz Butanda Macías, secretaria de Movilidad.
Por el lado del Poder Legislativo, asistieron la coordinadora de la Junta de Coordinación Política (JUCOPO), Fabiola Alanís Sámano, y la presidenta del Congreso del Estado, Giulianna Bugarini Torres.
La ausencia más notoria fue la del senador Raúl Morón Orozco, uno de los nombres que con frecuencia suenan rumbo a la sucesión estatal.
El comentario del mandatario generó diversas interpretaciones entre los asistentes, pues se dio en un contexto en el que comienzan a definirse los liderazgos y equipos políticos rumbo al próximo proceso electoral.
Ramírez Bedolla no abundó en su afirmación, pero su frase quedó flotando en el aire: una señal clara de que la carrera por la gubernatura en Michoacán ya empezó.
