Por Christián Gutiérrez
Hablemos de algo simple de comprender en la comunicación: qué es un mensaje.
Quiero decirles que, entre asesorados y alumnos, con mucha frecuencia me encuentro con que “ya saben lo que es un mensaje” y me aseguran cosas como esto: “El mensaje es la idea que se transmite”.
Esa es su idea de lo que es un “mensaje”, y desde luego, están en un error.
Para ejemplificar lo que sí es un mensaje, hablaré del PRI como partido político a nivel nacional y de Michoacán.
Parto de lo básico: ¿qué es un mensaje? Y me gusta explicarlo con una idea muy sencilla de comprender. Un mensaje es aquello que la gente recuerda después de que dejas de comunicar.
Esto parece muy simple, pero es tan complicado de comprender para algunos políticos y mucho más difícil de que logren comunicar mensajes de manera efectiva. La razón es una sola: están acostumbrados a tirar rollos que nadie recuerda y nadie los recuerda por dos cosas:
a) Son “discursos” muy extensos.
b) No utilizan todos los lenguajes que podrían utilizar. Se limitan al lenguaje verbal y dejan de lado el paraverbal y el corporal.
Los dos ejemplos:
1. Se dieron a conocer audios en donde se presume que el dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno (Alito) se escucha como el típico político corrupto que extorsiona y sugiere cómo castigar a los periodistas. ¿Qué fue lo que comunicó Alito como mensaje? Respondió varias ideas, y por lo mismo, fue difícil que la gente recordara una sola; eso mostró que su mensaje fue deficiente, por impreciso. Y el problema no solo fue este, si no que los priistas que pudieron defenderlo, no supieron hacerlo, porque nadie les explicó y les marcó la pauta de cuál era el único mensaje a comunicar. Entre que la mayoría de los priistas no estuvieron dispuestos a defender públicamente a su líder nacional y entre que no conocen la técnica de diseño y posicionamiento de mensajes, Alito y su partido salieron muy dañados en imagen y reputación.
2. El segundo ejemplo tiene que ver con el dirigente del PRI en Michoacán, Memo Valencia. Si lo conoce o lo sigue, trate de recordar si los discursos de este político tienen uno o algunos mensajes claros y precisos. Piense en lo que dice verbalmente cuando da ruedas de prensa, en sus discursos, al hacer videos de TikTok, en su discurso escrito cuando se pelea con el alcalde de Morelia, Alfonso Martínez, y etc. En realidad, este dirigente no tiene un mensaje o mensajes claros y precisos, y su partido menos; es un partido inexistente. Los discursos que comunica durante la semana están cargados de múltiples ideas sueltas que, difícilmente se recuerdan, por lo tanto, su mensaje también es muy deficiente.
En fin, la comunicación de un mensaje no es simple como ya lo establecí, mucho menos si no se tienen equipos de comunicación que hagan el trabajo fino.
Hoy puse como ejemplo al PRI, pero podría decir que todos los partidos tienen el mismo problema y casi todas y todos los políticos sufren de lo mismo: no saben diseñar y comunicar un mensaje.
Por cierto, les repito que, comunicar un mensaje no es tirar un rollo que nadie entiende y mucho menos se recuerda.
*El autor es consultor, tiene estudios de doctorado en Política, de maestría en Comunicación, de maestría en Neuromarketing, de maestría en Ciencia Política y de licenciatura en Derecho.