Por Javier Robledo
Para nadie es un secreto que el discurso presidencial desde el 1ro de diciembre del 2018 ha sido claro y directo, mismo que se ha venido resumiendo en una completa tregua del Gobierno Federal hacia el crimen organizado, con la liberación de Ovidio Guzmán, caso que se volvió tendencia mundial y donde el Gobierno y las mismas fuerzas armadas se vieron débiles, derrotadas y sumisas ante miembros de un cartel que demostró su fuerza y poderío ante los ojos del mundo, pero hagamos una secuencia del porqué suaviza sus palabras y las acciones en contra de grupos delincuenciales el presidente, liberan a Ovidio y le devuelven el favor Morena arrasa en Sinaloa, gana Gobernatura y prácticamente todos los distritos locales y alcaldías, lo mismo en Sonora y otros Estados donde existe presencia del Cartel de Sinaloa.
La llamada ruta del pacífico se pintó totalmente de guinda, ganando Morena las Gobernaturas de Michoacán, Colima, Nayarit y Sinaloa, los constantes guiños presidenciales con las frases como “abrazos no balazos”, “los delincuentes también son humanos” y hasta hablarles con “respeto” a criminales, lo a hecho tener un fuerte apoyo narco-político, mismo que genera un fuerte contrapeso en favor de Morena, en municipios, pueblos y comunidades donde el crimen organizado obliga y amenaza a pobladores a votar por el partido en el poder y terminan casillas con cientos de votos al partido guinda y quedan urnas vacías para los opositores, eso no es para nada normal en una democracia; el discurso de amor hacia criminales por un lado para atraer votos y apoyos facticos-políticos, pero por otro lado divides al país, poniendo líneas entre clase medieros “aspiracioncitas” y clase baja, entre chairos y fifís, y denostar contra científicos, médicos, intelectuales, académicos y cineastas.
Hoy la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) tiene más cuentas congeladas y el pie encima de adversarios políticos, que de los grandes capos del crimen organizado, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) persigue a periodistas que exhiben la corrupción del Gobierno, pero no hay ninguna investigación del SAT hacia movimientos bancarios y transacciones de integrantes de algún cartel, hoy las fuerzas armadas son humilladas por el crimen organizado, las corren de municipios, las corretean y le pasan por encima a una institución tan gloriosa, importante y respetada por todos los Mexicanos.
El mensaje de la mañanera del jueves pasado es claro, el presidente públicamente le envió un mensaje a esos integrantes de los poderos facticos, diciéndoles “yo los cuido y apoyo”, ustedes ayúdenme a ganar las elecciones en los 6 Estados de la Republica donde habrá elecciones, más claro ni el agua, hoy México vive en un narco Estado, el sexenio más violento, más sangriento, con más feminicidios, homicidios, desapariciones forzadas, desplazamientos, masacres y no hay ningún capo tras las rejas, ni ninguna cuenta congelada, regularmente cualquiera ya habría cambiado la estrategia después de tan grande fracaso en ya 4 años, pero está claro el pacto de impunidad y apoyo entre Gobierno y los Carteles, problema por el cual no solo los Mexicanos deberían estar preocupados, sino también los vecinos del Norte.