Morelia, Mich., a 13 de diciembre de 2021.- El gobernador Alfredo Ramírez Bedolla descartó que su estrategia de seguridad se vaya a basar en cazar a los capos de la droga que operan en Michoacán, luego de exponer algunos ejemplos sobre detenciones de líderes delincuenciales, como el caso de Joaquín Guzmán Loera, “El Chapo”, que no han derivado en mejoras para atacar la criminalidad que impera en diferentes entidades de la República.
“No es un tema de capos, detuvieron al Chapo Guzmán y está en una cárcel de alta seguridad en Estados Unidos y la delincuencia organizada está en niveles altos, es decir, que no es un tema de capos”, remarcó.
Ramírez Bedolla insistió en que la crisis de seguridad de la entidad se atacará mediante la coordinación con el gobierno federal, la cual, subrayó, no existía hasta antes de su llegada al Gobierno de Michoacán.
“Es un tema de coordinación, de avance concreto, quizás, hay que decirlo, el mayor avance que tenemos es restablecer la coordinación con el gobierno federal, porque hasta hace tres meses no existía”, subrayó.
Bajo estos argumentos, el mandatario michoacano reconoció que la problemática de seguridad por la que atraviesa la entidad se corregiría al paso de su sexenio, tras señalar que esta crisis se ha venido recrudeciendo desde hace por lo menos dos décadas.
“Lo dije, el tema no es 15 minutos, ¿cuánto nos va a llevar el tema de seguridad?, los seis años, porque el tema no es de ahora, el tema tiene dos décadas, entonces el tema es complejo por la ubicación que tiene Michoacán, porque estamos en la zona donde más homicidios hay a nivel nacional”, remató.